La llegada a casa de un cachorro de perro es un acontecimiento importante para todos los miembros de la familia. De hecho, se convertirá en uno más. Sin embargo, más que las ventajas, tenemos que valorar todos los posibles inconvenientes, y éstos casi siempre se presentan sólo si nosotros, los humanos, no actuamos correctamente.
Hemos de tener en cuenta que estaremos obligados a cuidar del perro durante toda su vida, y lo más probable es que esté a nuestro lado durante más de diez años. ¿Seremos capaces de aceptar esa responsabilidad durante todo ese tiempo?
Debemos meditarlo bien: vivir con un perro puede ser una experiencia única o puede llegar a ser- por irresponsabilidad, ignorancia o negligencia- un problema. La tenencia responsable de un cachorro implica saber y aceptar que además de proporcionarle cariño, tendremos que:
- Administrarle una dieta equilibrada.
- Proporcionarle un lugar adecuado donde vivir.
- Ofrecerle tiempo y espacio para juegos y paseos.
- Asearlo regularmente.
- Facilitarle una educación adecuada que permita la convivencia con los demás.
- Llevarlo periódicamente al veterinario.
¿Crees que estás preparado para llevarlo a cabo?
Fuente: El País, Sogecable, SA, César Millán, Carlos Rodríguez.
